Teatro

“. Todas las personas y todas las cosas tienen historias que contar. A algunas de ellas se llega a través de gente como yo, que las relata para que no se olviden. Otras, en cambio… se viven”
Laura Gallego García, Donde los árboles cantan

martes, 16 de septiembre de 2014

Ensayo comparativo de Mary Reilly de Stephen Frears con El extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde de Robert L. Stevenson.

En el siguiente ensayo se compara la novela de Robert L. Stevenson, El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde, con la película, que es una adaptación de la de Stevenson, Mary Reilly de Stephen Frears. Ambas tramas cuentan la historia de un doctor que descubre cómo transformar su lado malo, es decir, separado de "su lado bueno". El doctor Jekyll crea una pócima que lo convierte en Hyde aunque, en un principio, nadie lo sabe. Él puede hacer el mal a su gusto y después no sentir culpa cuando vuelve a ser Jekyll.
En ambos casos la trama es como la de un policial pues en el principio de la película, como también en la novela, no se sabe la verdadera identidad de Hyde. Sin embargo, en la película, es el mismo actor el que interpreta a Hyde y a Jekyll, lo que muestra desde antes al espectador, la resolución del enigma.
De cualquier manera, en ambos casos, existe una figura de detective que es el que logra dar una explicación al caso de Jekyll y Hyde.
En el caso de la nobela la figura del detective representada en el notario, Utterson,  amigo muy cercano de Jekyll, en quien él confía, y quién comienza una investigación después de leer una extraña cláusula en el testamento de Jekyll:
" ...no sólo que tras el fallecimiento de Henry Jekyll  [...]todo cuanto poseía fue a parar a manos de su amigo y benefactor Eduard Hyde, sino que también en el caso de su desaparición o ausencia inexplicable del doctor Jekyll durante un período de tiempo mayor a a tres meses antedicho Eduard Hyde  pasaría a disfrutar de todas las pertenencias de Henry Jekyll..."
A su vez en la novela también aparecen otros puntos de vista gracias a las cartas que Utterson va recibiendo una de ellas es la de Lanyon,  otro amigo de Jekyll al que este le pide ayuda que termina presenciando la transformación de Hyde a Jekyll. Lanyon,  en este caso toma el papel de testigo, ya que le cuenta al lector sobre la transformación de Jekyll.
Finalmente aparece una última carta que termina de develar el enigma desde su centro mismo: una carta escrita por el propio Henry Jekyll, que cuenta cómo había surgido en realidad su necesidad por ese otro yo, que el tanto había reprimido durante años y Cómo, éste, después se les fue de las manos. Podríamos hablar de una alegoría ya que puede compararse a Hyde con una adicción que Jekyll ya no era capaz de controlar.
Por otro lado, en la película, todos los punto de vista son reemplazados por el de Mary Reilly que en un principio, junto con la cocinera es quien ve a Hyde y  decide comenzar a investigar. El espectador asume su punto de vista ya que sabe lo que Mary sabe durante todo el film.
Ella, a su vez, es también, la que presencia los actos de maldad de Hyde, como la muerte Carew, o cuando le pega a una nena y quien,  después presencia la transformación  de Hyde en Jekyll. Es decir, en el caso de la película, Mary  también toma la posición de testigo, que antes había tomado Lanyon, Enfield y la ama de llaves.
Mary, a su vez, relaciona desde su persona el caso del Dr. Jekyll con su padre alcohólico y, por ello, la trama se construye a través de un paralelismo entre su pasado, representado por  su padre, que como Jekyll, cuando tomaba liberaba su lado malo, y su presente representado por  Hyde y Jekyll, en una relación casi edípica. Mary ve a Jekyll (y también a Hyde) desde un punto de vista amoroso, pues se termina enamorando de ellos. Es por eso que también desde el punto de vista de Mary sobre Hyde es tan diferente del del resto, ya que ella siente amor por el.
En conclusión, en la novela se relata todo en forma de exterioridad hacia interioridad, desde afuera hacia adentro,  y termina con la resolución del enigma. En la película, en cambio, el punto de focalizacion nunca cambia y está íntimamente relacionado con el amor que siente Mary por el doctor Jekyll y también por Mr. Hyde.